El caserón de las sombras

En una época en la que parece ser que como uno no meta en una película de terror altas dosis de gore, sangre y de mal gusto para contentar a la mayoría de la gente... en una época en la que parece ser que el cine de terror es sinónimo de mala calidad y nula creatividad... siempre viene bien echar la vista atrás, apagar las luces de casa, y ponerse a ver "El caserón de las sombras", todo un clásico de la Universal. He de decir que esta película estuvo desaparecida durante décadas por una cuestión de derechos, y, hace poco, fue rescatada del viejo archivo de la compañía, por lo que en la década anterior muchos la hemos podido disfrutar en DVD. Son muchos los motivos por los que me he decidido a incluir esta película en el particular ciclo de cine de terror que he iniciado hace poco en el blog, y es que estamos no sólo ante uno de los primeros ejemplos de película de terror con casa "encantada" de escenario de fondo, sino que también estamos ante lo que se podría considerar uno de los primeros films de terror psicológico (desde cierto punto de vista). Y bueno, además de todo esto, tenemos a Boris Karloff desempeñando uno de esos papeles tan carismáticos que tan bien hacía.

Ficha técnica:

Título: El caserón de las sombras

Título original: The Old Dark House

Año: 1932

Duración: 72 min.

País: Estados Unidos

Director: James Whale

Guión: Benn W. Levy (Novela: J. B. Priestley)

Música: David Broekman

Fotografía: Arthur Edeson

Reparto: Boris Karloff, Melvyn Douglas, Charles Laughton, Lilian Bond, Raymond Massey, Gloria Stuart

Productora: Universal Pictures

Género: Terror.

Si mezclamos a James Whale y a Boris Karloff, muchos pensarán en "El Doctor Frankenstein", esa maravilla producida por la Universal en 1931. Al año siguiente, los altos cargos de la compañía, motivados por el éxito que había tenido el film de Whale, le pidieron al director que hiciese una secuela. Lejos de querer realizarla (aunque todos sabemos que al final la realizó), Whale decidió darle a Karloff un papel no muy distinto al del monstruo en lo que a estética se refiere (o inteligencia, según se mire), y ubicarle en una vieja mansión abandonada, en un contexto diferente. Cierto es que estamos ante uno de los primeros ejemplos de cine de casas encantadas, teniendo un claro antecedente en la película de 1927 "El legado tenebroso". Pero, a diferencia de su antecesora en dicha temática, en "El caserón de las sombras" ya existía el cine sonoro (que por cierto, estaba dando sus primerísimos pasos).

Paso a hablar del argumento en sí, el cual, aunque hoy en día pueda parecer demasiado tópico, por entonces era el no va más de la originalidad... Además, la película estaba basada en una novela de Jason B. Priestley, publicada en España bajo el título "Perdidos en la noche" ("Benighted", en el original). Por ende, tenemos una nueva adaptación novelística en formato cine por parte de la Universal. La historia parte de la siguiente premisa: un grupo de adultos formado por una pareja, Philip y Margaret Waverton (Raymond Massey y Gloria Stuart), y un tercer integrante, amigo de la pareja, Roger Penderel (Melvyn Douglas), se halla de viaje atravesando Gales, pero el vehículo en el que viajan apenas puede avanzar debido a la brutal intensidad de las lluvias ante las que se encuentran sometidos. Es en el momento en el que por los pelos logran atravesar un desprendimiento de montaña a causa del fuerte temporal cuando deciden alojarse en el próximo lugar con techo que encuentren... De ahí que vayan a parar a un viejo caserón envuelto en la oscuridad de la noche, en el que son recibidos por un perturbador criado de nombre Morgan (Karloff), y una extraña familia, los Femm, quienes parecen estar un poco locos... La familia está formada por Horace (Ernest Thesiger) y Rebecca (Eva Moore), aunque pronto el espectador se dará cuenta de que ellos no son los únicos residentes de ese tétrico lugar...

Si antes decía que podríamos estar ante uno de los primeros films de terror psicológico, esto es debido a varios factores. Aunque hoy en día el argumento esté más que manido, por entonces era algo original, ya lo he dicho antes; pero, si por algo destacaba era porque, aún a día de hoy, mientras uno ve el film, no se sabe a ciencia cierta qué demonios ocurrirá después de que el trío protagonista se aloje en el caserón Femm. Uno tampoco sabe a ciencia cierta qué papel desempeña Morgan, aunque al poco de entrar en la casa, Horace y Rebecca Femm ya empiezan a hablar mal de su criado, diciendo cosas de él como que es peligroso cuando se emborracha, que es un pervertido, etc... Pero, sin duda, lo que más perturba durante la película, más que el caserón en el que se encuentran cobijados, es la fuerte tormenta. Whale se sirvió de los efectos sonoros para prescindir de una banda sonora y, en lugar de ésta, añadir efectos como el del fuerte y constante sonido del viento, los truenos y relámpagos azotando la zona, así como las puertas chirriantes, un sonido más que perturbador de aquella (prueba de ello es el que dicho sonido siga perturbando hoy en día).

En cuanto a las actuaciones, he de decir que quienes se llevan la palma son Karloff haciendo de Morgan, el silencioso criado (tan silencioso y fuerte como Frankenstein), y Horace Femm, interpretado por un grandioso Ernest Thesiger, quien aparecería como el doctor Pretorius en "La novia de Frankenstein", un mad doctor en toda regla... Pero aquí encarnaba al hombre de la casa, por llamarlo de algún modo, ya que parece ser que quien de verdad manda en el lugar es su histérica y puritana hermana, Rebecca (Eva Moore), actriz sobre la que Whale aplicó algunas de las tomas más perturbadoras. Sin duda la actuación que más me gusta, incluso por encima de la de Karloff (que ya es decir), es la de Thesiger. Tan sólo hay que ver cómo este hombre se mete en el papel, cómo pronuncia la palabra "potato" a la hora de ofrecerles comida a sus inesperados huéspedes (recomiendo fervientemente ver la película, al igual que las demás producciones de esta época, en versión original subtitulada). En cuanto al resto del reparto, destacaría a Charles Laughton interpretando a Sir William Poterhouse, y a Gloria Stuart (la abuelita de "Titanic") haciendo de Margaret Waverton, un papel algo distinto de los que adoptaría en otras películas de Whale, ya que aquí se nos muestra más "suelta", por así decirlo, mostrándose en ropa interior durante un buen rato, algo por entonces prácticamente inaudito. Además, la censura del código Hays no tocó a este film, permitiendo cierta libertad a Whale, de ahí que podamos escuchar alguna que otra frase malsonante, insertada intencionada y hábilmente por el director.

Es curioso que, además de ser una película de terror, "El caserón de las sombras" cuente con un elemento cómico. Esto era algo propio del cine de Whale, como ya demostraría con creces en posteriores trabajos (a destacar el humor negro de "El hombre invisible"). De todas formas, algo me hace pensar que dicho toque humorístico surgió más bien fruto de la casualidad, para rellenar huecos del guión... o para realzar, de cara al espectador, lo locos y paranoicos que eran los Femm. Hay otras cosas que me llaman la atención, como el hecho de que en esta ocasión sí que aparezca el nombre de Boris Karloff en los créditos (en "El Doctor Frankenstein" aparecía simplemente simbolizado por una "?"). De hecho, al principio de la película tenemos el siguiente aviso, el cual se nos mostraba por motivos claramente publicitarios: "Aviso del productor: Karloff, el mayordomo loco de esta película, es el mismo Karloff que hizo el papel de monstruo en Frankenstein. Hacemos esta advertencia por la polémica que pueda surgir, aunque eso no haría más que confirmar la gran versatilidad de este actor". Por último, debería mencionar también a Sir Roderick Femm, el anciano padre de los hermanos Femm, quien con un efectivo maquillaje parecía un hombre. Y digo esto porque, aunque en los créditos apareciese bajo el nombre de John Dudgeon, estaba interpretado por una mujer, Elspeth Dudgeon.

De este último personaje me quedo con una frase: "Esta es una casa maldita" ("This is an unlucky house"), y es que, a lo largo de la película, vemos que no es el caserón lo que de verdad resulta inquietante, sino la familia que vive en él. Esto es importante porque, lejos de películas que redefinieron el género en los 70 como "La matanza de Texas" o bodrios de principios del siglo XXI como "La casa de los 1000 cadáveres", así como de series cómicas de estética propia del cine de terror de esta década como "La familia Addams", tenemos ya en 1932 a una familia loca, que vive alejada de la mano de Dios, en un sitio en el que su retorcida psique encaja perfectamente. Olvidad a esas familias locas de los mencionados films, amantes del canibalismo y de la sangre, así como de la tortura humana. Eso son tonterías fruto de la falta de creatividad (o fruto de lo que quieren la mayoría de los espectadores). La familia Femm tan sólo tenía que ser ella misma; transmitir sus paranoias, preocupaciones y manías al espectador y a sus inquilinos para resultar, sin quererlo, inquietantes (y algo cómicos, dicho sea de paso). En fin, una película muy importante de esta época, todo un must see. Al fin y al cabo, estoy hablando sobre una película de terror de James Whale...

Valoración personal: 8/10.